Ignoraba que ayer era el día de la poesía, hoy lo celebro, porque es bonito que un día del año sea recordado ese ente, ese algo que antes de caer en un papel en forma de letras ha caminado por el interior de tantos y tantos poetas hasta nuestros días.
La poesía trae consigo un equipaje variado, trae la búsqueda de palabras nuevas para sentimientos viejos, trae sentimientos nuevos en palabras viejas; trae tinta, trae papel, trae secante para la lágrima.
La poesía es, ese mundo que flota en el pensamiento, en la mirada, en los ojos, y por tanto, quien decide ir en pos de ella tiene un poco de cazador de lo abstracto, recolector de inspiraciones, navegante de sentimientos y a veces, astronauta: bien sabido es que antes de poner un pie físicamente en la Luna, ya lo habría hecho algún poeta.
La poesía está ahí, en todo modo, y quizás se siente cuando, al dar el paso de leerla, ella corresponde dando el paso de tocarte.